|
El día 10 de enero de 2017, al as 19 horas, en el Salón de Actos del Excelentísimo Ayuntamiento de Ávila, nuestro Colegio recibió el primer premio de belenes convocado por el mismo y presentado por la Asociación de Madres y Padres de los Alumnos. |
|
|
Aquí os dejamos algunas fotos del belén que construimos con mucha ilusión los chicos de 6º con ayuda de nuestras familias y nuestro tutor Valeriano. |
|
Extintores co2 2 kg
Extintor 6 kg abc
| 카지노사이트 |
| 카지노사이트 |
| 카지노사이트 |
| 우리카지노 |
| 우리카지노 |
| 바카라사이트 |
En el mundo de la hostelería, nada se deja al azar. Ni los fogones, ni los hornos, ni mucho menos el sistema que mantiene el aire limpio en plena faena: la campana extractora. Quien piense que instalarla consiste en colgar un aparato en la pared, se equivoca de cocina. En los restaurantes y colegios donde se cocina a diario, lo que de verdad se necesita es una combinación perfecta entre eficiencia, seguridad y cumplimiento normativo. Y ahí entra en juego el mobiliario de hostelería de acero inoxidable, un elemento que no solo garantiza higiene y durabilidad, sino que además es el gran aliado para cumplir con las exigentes normativas sanitarias y de seguridad alimentaria que rigen las cocinas profesionales e incluso las escolares.
Antes de taladrar una pared o conectar un cable, la clave está en la planificación. Medir el espacio disponible, calcular el caudal de extracción y comprobar la ventilación son los tres pilares de una instalación eficiente. Una campana extractora industrial necesita un recorrido de aire fluido y sin obstáculos. El diámetro de los conductos, la longitud del tubo y el tipo de salida de humos influyen directamente en el rendimiento. Si el aire no fluye, los humos se acumulan, y eso —en una cocina profesional— es tan peligroso como un aceite sobrecalentado.
Conviene revisar la normativa local sobre extracción de humos antes de comenzar. En muchas comunidades autónomas, las cocinas de uso colectivo deben contar con un sistema de ventilación que garantice la renovación completa del aire y la eliminación de gases combustibles. Y, por supuesto, no olvidemos la seguridad eléctrica: desconectar la corriente antes de cualquier manipulación es una regla de oro. Las descargas eléctricas no son un riesgo menor; son una amenaza real que puede evitarse con una simple comprobación.
Una instalación profesional comienza con una preparación meticulosa. Las herramientas básicas incluyen taladro percutor, brocas de varios diámetros, destornilladores, nivel láser, llaves inglesas y una buena cinta métrica. Pero tan importante como el equipo es la protección del instalador: gafas, guantes, mascarilla y calzado de seguridad. La seguridad personal es tan esencial como la limpieza de los filtros.
Y hablando de materiales: el acero inoxidable vuelve a ser protagonista. En cocinas donde el vapor, la grasa y el calor son constantes, solo este material garantiza resistencia, higiene y cumplimiento de normativas sanitarias. Además, es un excelente conductor del orden visual: la armonía del acero da sensación de limpieza, profesionalidad y control.
El soporte de la campana debe ser sólido y perfectamente nivelado. Lo ideal es anclarla sobre perfiles metálicos fijados al techo o la pared, según el modelo y el tamaño del equipo. Aquí no valen los “más o menos recto”: una desviación mínima puede alterar el flujo del aire y forzar el sistema. La ayuda de otra persona en el montaje es casi obligatoria. Entre ambos, se eleva la campana y se asegura con tornillos y arandelas de alta resistencia.
Las cocinas profesionales deben contemplar un sistema de conductos robustos, preferiblemente también en acero inoxidable, que mantenga un flujo constante de aire limpio. Y si el volumen de extracción lo requiere, es recomendable añadir un extractor secundario para reforzar la salida de humos. Cada detalle cuenta: la altura respecto a los fogones, la inclinación y el sellado de las uniones determinarán si la campana trabaja al 100% o si se convertirá en un nido de grasa y humos mal evacuados.
La conexión eléctrica debe ser ejecutada siempre por un electricista certificado. Es la única forma de garantizar que la instalación cumple con la normativa y con los estándares de seguridad industrial. Una vez conectada, se realizan las pruebas de funcionamiento: comprobar que el caudal de extracción es el correcto, que las luces se encienden y que no existen fugas en las uniones. Las campanas de nueva generación, además, incorporan sensores de temperatura y sistemas automáticos de extinción de incendios, un extra que marca la diferencia en materia de seguridad.
En este punto conviene valorar la opción de una campana extractora industrial mural. Este tipo de modelos ofrecen una instalación más versátil, ideal para cocinas donde cada centímetro cuenta. Además, permiten una evacuación directa, simplificando la configuración del sistema de ventilación sin renunciar a la potencia de aspiración necesaria en entornos profesionales.
Más allá del diseño o la funcionalidad, el uso de mobiliario de acero inoxidable en cocinas industriales responde a una cuestión de normativa. En España, las regulaciones sanitarias y de seguridad alimentaria obligan a que los materiales en contacto con el entorno de cocina sean no porosos, resistentes, lavables y duraderos. Por eso, mesas, estanterías, fregaderos y, por supuesto, campanas extractoras fabricadas en acero inoxidable son la opción más segura y eficiente.
Su superficie lisa y resistente evita la acumulación de bacterias y facilita la limpieza profunda. Además, el acero es capaz de soportar el uso intensivo y las altas temperaturas sin deformarse. En cocinas escolares, donde la seguridad de los menores es una prioridad absoluta, este tipo de equipamiento es incluso más exigido por la normativa vigente. Cumplir no es una opción: es una obligación que garantiza la salubridad y el funcionamiento óptimo de cada espacio culinario.
Una vez instalada la campana, el siguiente paso es garantizar que todo el sistema de ventilación trabaja en armonía. Los conductos deben estar perfectamente sellados con cinta de aluminio de alta resistencia y las uniones deben revisarse para evitar fugas. Un caudal insuficiente o una pérdida de presión pueden reducir drásticamente la eficacia del sistema.
En cocinas de alto rendimiento, recomendamos añadir sistemas de filtración de carbono para neutralizar olores y partículas. No son un lujo, son una necesidad operativa. Y si se quiere alcanzar un nivel superior de control ambiental, conviene optar por soluciones de equipamiento de hostelería que integren ventilación, filtrado y control electrónico en un solo conjunto. Estas configuraciones no solo mejoran la calidad del aire, sino que además optimizan el consumo energético.
Antes de dar por concluida la instalación, llega el momento de la verificación. Se revisan todas las uniones, se prueban los filtros y se comprueba que el caudal de extracción se mantiene dentro de los valores recomendados. Un anemómetro puede ayudar a medir la potencia de succión real. Si el flujo de aire no es suficiente, puede que el conducto esté parcialmente obstruido o que el diámetro sea incorrecto.
El mantenimiento de la campana extractora no se limita a limpiar los filtros de vez en cuando. Implica una revisión periódica de los motores, la comprobación de los sistemas eléctricos, el cambio de filtros de carbón activo y la limpieza profunda de los conductos internos. Un mantenimiento descuidado puede provocar sobrecalentamientos, ruidos molestos y, en el peor de los casos, incendios por acumulación de grasa. En cambio, una campana bien mantenida prolonga la vida útil del resto del equipamiento y garantiza un entorno de trabajo más seguro y eficiente.
La instalación correcta de una campana extractora no es un trámite técnico; es un compromiso con la seguridad, la eficiencia y la higiene. En el sector de la hostelería, donde cada detalle cuenta, contar con un mobiliario de acero inoxidable de calidad y una instalación profesional es la base de cualquier cocina moderna. Desde la planificación inicial hasta el mantenimiento continuo, todo debe orientarse hacia el cumplimiento normativo y la excelencia operativa.
En MiMobiliarioHosteleria acompañamos a chefs, técnicos e instaladores en cada paso del proceso, ofreciendo asesoramiento, suministro y montaje de equipamiento certificado. Porque una cocina profesional no se mide por sus fogones, sino por su capacidad de mantener el aire limpio, el entorno seguro y las normas cumplidas.
Instalar una campana extractora correctamente es, en definitiva, instalar tranquilidad. Y eso, en cualquier cocina, es tan importante como el mejor plato del menú.